El crecimiento de Móstoles en los últimos años ha traído consigo un desafío poco visible, pero cada vez más urgente: el control de plagas subterráneas.
Bajo el asfalto y los edificios se extiende una red de canalizaciones, colectores y alcantarillas donde ratas y cucarachas encuentran el entorno perfecto para vivir, alimentarse y reproducirse.
Lo que ocurre en ese subsuelo —fuera de la vista y del mantenimiento cotidiano— está afectando directamente a la superficie: malos olores, aparición de roedores en garajes y sótanos, e incluso presencia de cucarachas en viviendas y locales comerciales.
La desinfección de plagas en Móstoles no es solo una cuestión de higiene: es una necesidad estructural que condiciona la salud y la imagen de toda la ciudad.
Por qué Móstoles es un punto crítico para las plagas urbanas
Su tamaño, densidad y la mezcla de zonas residenciales, antiguas y nuevas, convierten a Móstoles en un terreno vulnerable.
Los barrios más antiguos tienen redes de saneamiento envejecidas, mientras que las zonas más modernas comparten infraestructuras conectadas que facilitan el desplazamiento de plagas de un edificio a otro.
Durante los meses fríos, las ratas buscan calor ascendiendo por los desagües hacia viviendas y locales.
En verano, la humedad y los restos orgánicos en el alcantarillado hacen que las cucarachas se multipliquen de forma explosiva.
Sin una estrategia profesional de desinfección, las infestaciones reaparecen cada temporada con más fuerza.
El verdadero origen del problema: el alcantarillado
La mayoría de los focos de infestación detectados por los técnicos de Plagas Ibérica Móstoles se localizan en el subsuelo: arquetas abiertas, tuberías sin válvulas antirretorno o redes pluviales sin mantenimiento.
Estos espacios, invisibles para los vecinos, son los auténticos epicentros de la actividad de plagas.
Por eso, una intervención superficial no basta: la desinfección debe empezar en la base de la infraestructura urbana.
Desinfección profesional: cómo actuamos en Móstoles
En Plagas Ibérica Móstoles, hemos desarrollado un protocolo técnico adaptado a las características del municipio.
Nuestro enfoque combina inspección, tecnología y mantenimiento continuo:
- Mapeo subterráneo del sistema de alcantarillado mediante cámaras de inspección.
- Desinfección biocida integral, con productos seguros y certificados por Sanidad.
- Instalación de trampas inteligentes y sensores para detectar movimientos de plagas.
- Sellado de fisuras estructurales y arquetas vulnerables.
- Programas de seguimiento periódico, ajustados a la estacionalidad local.
Este tipo de mantenimiento predictivo permite detectar los focos antes de que se conviertan en infestaciones visibles, reduciendo costes y mejorando la eficacia a largo plazo.
Móstoles empresarial y residencial: distintos escenarios, mismo reto
Los problemas no solo afectan a comunidades de vecinos.
En zonas con alta concentración de locales de restauración, garajes o almacenes —como la Avenida de la Constitución o el barrio de Villafontana—, la acumulación de residuos y humedad acelera el crecimiento de las plagas.
Por eso, cada plan de desinfección de plagas en Móstoles se diseña de manera personalizada, teniendo en cuenta la tipología del inmueble, la antigüedad de la red y el tipo de actividad que se realiza en la zona.
Conclusión: la salud de Móstoles empieza bajo tierra
La lucha contra las plagas en Móstoles no se gana en la superficie, sino en los túneles que no se ven.
Un alcantarillado limpio, sellado y controlado es la primera línea de defensa para mantener una ciudad saludable y segura.
En Plagas Ibérica Móstoles, trabajamos en ese nivel invisible donde se origina el problema.
Nuestro objetivo no es solo eliminar plagas, sino restablecer el equilibrio urbano desde sus cimientos, para que la tranquilidad vuelva a la superficie.



